La verdad es que cada persona que entra en nuestra vida está relacionada con un sentimiento, con una sensación...qué hacer en aquellos momentos en los cuales esa persona comete un error y queremos dejar de sentir respecto a ella?
La verdad es que es algo muy relativo, algo que además está totalmente fuera de nuestro alcance, aunque no absolutamente, ya que podemos reforzar ciertos aspectos, como decisiones y actitudes, que nos ayudan a dar un giro respecto a nuestro sentir....todo anda bien hasta aquí, pero qué pasa entonces en el momento en que vemos a la persona luego de haber tomado ciertas decisiones?
Realmente en ese momento es cuando nos llega la prueba de fuego, cuando tenemos la oportunidad de actuar y la revolución interna que se manifiesta en nuestro interior nos hace pensar diferente por el mismo hecho de que SENTIMOS, sentimos con cada uno de nuestros sentidos, valga la redundancia. Entonces, què nos queda? Pues simplemente seamos analíticos a la hora de tomar decisiones y racionales a la hora del encuentro.
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